Nutrición y energía: cómo lo que comes afecta tu bienestar físico. Tu alimentación influye directamente en tu rendimiento físico, tu estado de ánimo y tu capacidad para mantener una vida activa y saludable.

Moverte requiere energía. Y esa energía proviene de lo que comes. Una nutrición adecuada no solo mejora el rendimiento físico, también regula el estado de ánimo, favorece el descanso y te da la motivación necesaria para mantenerte activo.

Una dieta basada en alimentos reales, naturales y variados proporciona los nutrientes que tu cuerpo necesita para sostener el movimiento diario. Evita el consumo excesivo de azúcar y alimentos ultraprocesados, ya que pueden causar picos de energía seguidos de fatiga física y mental.

Hidratarte correctamente es igual de importante. Incluso una leve deshidratación puede afectar tu claridad mental, tu rendimiento físico y tu bienestar general. Ingiere frutas, vegetales, grasas saludables como aguacate o nueces, y proteínas magras que alimenten tus músculos sin sobrecargar tu sistema digestivo.

No se trata de seguir una dieta perfecta, sino de entender qué alimentos funcionan mejor para tu estilo de vida. Recuerda que lo que comes influye en cómo te sientes. Si tu cuerpo está bien alimentado, tendrás más energía para moverte, para pensar, para vivir.

Cuidar lo que comes es una forma de respaldar tu bienestar desde adentro. Cuando cuerpo y mente están nutridos, tu vitalidad se nota en cada paso.